Es inexplicable que Zahora lleve quince años esperando unas ordenanzas de regularización.
La administración es la principal responsable de lo que sucede en Zahora.
En dos artículos publicados en la prensa relacionados con una nueva construcción turística ilegal en Zahora, salta a la vista la implicación de las administraciones en la compleja situación que existe en esta población que carece de regularización urbanística y de servicios públicos indispensables para cualquier población. Si "Zahora no tiene remedio" como se lee en la prensa, es porque los políticos responsables dedican su atención a la realización de "macroproyectos turísticos" relegando a un segundo plano a la población, y es en este abandono permanente de las administraciones donde se encuentra la raíz del problema.
Está claro, que para estos políticos el delito no es construir en primera o segunda línea de playa las moles de hormigón de los macroproyectos que ellos fomentan, sin ningún respeto al medio ambiente, ni estética, ni visión de futuro, para eso están las modificaciones puntuales de los PGOU y las recalificaciones de rústico a urbano. Para ellos el delito parece que es, el que los habitantes del lugar, los nacidos y los que viven allí, los centenares de propietarios de la tierra hayan construido sus casas para poder vivir en y de ellas, permaneciendo en una situación de ilegalidad propiciada por la propia administración, que durante quince años no ha cumplido las obligaciones que dimanaban de los planeamientos urbanísticos aprobados y vigentes, y es esta inactividad la que ha impedido que los habitantes de Zahora legalicen sus viviendas y sus negocios y paguen sus correspondientes impuestos.
No es la primera vez que el colectivo vecinal de Zahora denuncia públicamente estos hechos. Quizás la Fiscalía debería investigar este flagrante abandono de la población de Zahora, en vez de perseguir construcciones sobre suelo urbanizable, que en principio no serian competencia suya. Construir sobre suelo urbanizable sin ningún tipo de protección especial no supone delito contra la ordenación del territorio, puesto que esos suelos están ya predeterminados para urbanos, como su propio nombre indica.
En este sentido hay que señalar que en 1996 se aprobó el P.G.O.U. de Barbate que comprende un "Plan Especial de Mejora del Medio Rural "para regularizar las viviendas entonces existentes y calificando una gran parte de Zahora como "suelo urbanizable no programado" para un crecimiento regularizado (zonas en la que actualmente están construidas la mayoría de las viviendas) y el resto como suelo rústico.
Han pasado 14 años y la administración no ha desarrollado este Plan y, sin embargo ahora, con la modificación puntual de la zona hotelera en Trafalgar y con el POT de La Janda, la Junta y el Ayuntamiento pretenden recalificar esos suelos rústicos para construir nuevos asentamientos turísticos, incluso por encima de factores medioambientales que los hacen no urbanizables, mientras la población continua sin regularizar a pesar de que en 1999 el Ayuntamiento aprobó en sesión Plenaria un Protocolo para la legalización de los negocios que había en Zahora y Los Caños que no ha cumplido, que en 2000 aprobó un Convenio con la Asociación de vecinos para participar en "la revisión" del PGOU y legalizar las viviendas de los vecinos, que tampoco ha cumplido.
Que por este hecho, los vecinos interpusieron un recurso contencioso administrativo cuya sentencia les fue favorable y el Ayuntamiento, ahora con los socialistas al frente, desde enero de 2008 está incumpliendo.
Pero la inactividad en el desarrollo urbanístico, no es todo el problema. Inexplicablemente desde hace 20 años, estas mismas administraciones en general han desatendido prácticamente todas y cada una de las demandas vecinales reclamando sus legítimos derechos, manteniéndolos sin los servicios públicos más básicos e indispensables y en un permanente abandono, generando así este panorama desolador y de pesadumbre, lleno de problemas, de agravios, discriminación e injusticias, más propio de poblaciones de otras épocas y latitudes.
En Zahora, Barbate, a 27 abril de 2010.
José Antonio Mármol Román
Presidente de la
Asociación de Vecinos de Zahora y Caños de Meca “Costa de la Luz”
Así lo publica hoy el Diario de Cadiz:
Los vecinos de Zahora culpan a las administraciones del "abandono" del núcleo rural
"Si Zahora no tiene remedio es porque los políticos se dedican a los macroproyectos turísticos y no a la población", argumentan
J. G. / CÁDIZ | ACTUALIZADO 28.04.2010 - 05:01
La Asociación de Vecinos Costa de la Luz, que representa a unas 340 familias de Zahora, culpa a las administraciones públicas de la situación de "abandono" que sufre el núcleo rural barbateño, donde no hay regulación urbanística ni servicios básicos como el abastecimiento de agua y el saneamiento. En un comunicado, la asociación señaló que "si Zahora no tiene remedio es porque los políticos responsables dedican su atención a la realización de macroproyectos turísticos relegando a un segundo plano a la población". "Es en este abandono permanente de las administraciones donde se encuentra la raíz del problema", criticó el representante vecinal, José Antonio Mármol.
Mármol se refirió en un comunicado a los dos proyectos turísticos de la zona: los históricos hoteles de Trafalgar, respaldados por la Administración andaluza y bloqueados desde hace años por un conflicto entre empresarios y propietarios del suelo, y el desarrollo del área de oportunidad turística Trafalgar-San Ambrosio, reflejado en el Plan de Ordenación del Territorio (POT) de La Janda.
"Para los políticos el delito no es construir en primera o segunda línea las moles de hormigón que ellos fomentan, para eso están las modificaciones puntuales de los PGOU y las recalificaciones de rústico a urbano. Para ellos el delito parece que es que los centenares de propietarios de la tierra hayan construido sus casas para poder vivir en y de ellas, permaneciendo en una situación de ilegalidad propiciada por la administración", argumentó Mármol, que no especificó que cientos de estos vecinos han construido de forma ilegal y no más allá del último decenio.
La asociación Costa de la Luz sostiene que "durante quince años" el Ayuntamiento de Barbate y la Junta no han cumplido las obligaciones que dimanaban de los planeamientos aprobados y vigentes y tampoco la sentencia judicial de 2007 que insta a la ordenación de la zona. "Es esta inactividad la que ha impedido que los habitantes de Zahora legalicen sus casas [hay un millar] y sus negocios y paguen sus correspondientes impuestos", esgrime.
Mármol, que señaló que su objetivo no es defender a Zahora Riad, el último hotel construido y abierto al margen de cualquier regulación junto a Trafalgar, instó a la Fiscalía a investigar "este flagrante abandono de la población" en vez de perseguir construcciones sobre suelos que ya están "predeterminados para ser urbanos".
